LA CIUDAD EN MOVIMIENTO

viernes, diciembre 10, 2004:

supercolocada

Faltaba poco para las 10 pm. Lo supe al ver el número de personas esperando taxi en el sitio. Ni modo, tuve que hacer fila. Hacia frío y lo único que quería era llegar a casa, tomar chocolate y ponerme a leer el buten de revistas que compre en la semana. Ah, y poner el cd-r de 8 bit punk que mola mazo.

Bleep.. can can watta watta... bleep.

Ahí estaba ella. Un oxymoron en sí. Melena corta, pantalones ajustados con la valenciana sobre los tobillos, zapatos aperlados de tacón alto y saco marinero de color azul marino (acaso no hay de otro color?). Me recordó a una amiga de la secundaria que trabajaba como policía. Esperen un momento, no... era más parecida a Terry, el junior desprejuiciado y descarado en Candy, Candy.

Un grito de ayuda en ON. La escuche discutir con el encargado del sitio. Le oí proferir un par de amenazas. Me reí con los gritos que lanzaba a los autos y otros trauseuntes: How a such big Christmas tree! Crazy young woman.

Ya en el taxi, en la parte de enmedio. Incómodidad. Escuchando baladas pop setenteras. Vaya suerte, no? Supercolocada inicia su perorata.

—Oiga, que bonito clima hace en Playas... taxista, taxista.
(silencio)
—Bueno, para los pescadores y las redes.
—Iuuuuooooi.
(risas de la pareja que iba en el asiento de enfrente)
—Jesus, nunca bastante.
(wtf! de qué está hablando esta tipa)
—El frío es atómico. Taxista... súbele a la music
(suena La Revolución de Emiliano Zapata)

El viaje se hace eterno, sus grititos de Ahhhh, wonderful trip se repiten una y otra vez. Pachecos of the world united and take over (and over and over). Finalmente, sintiendose ignorada por todos, Supercolocada pide la bajada frente a la Delegación. Paga con un billete de 200 pesos y entra a la oficina de la Policía.
Scary.


Please, don´t bother me (estoy cambiando de canal)

rafa // viernes, diciembre 10, 2004